El Ayuntamiento trabaja para abrir al público antes de final de año el yacimiento arqueológico de la calle San Nicolás

VISITA YASIMIENTO CALLE SAN NICOLAS
Imagen de la visita al conjunto arqueológico

La teniente de alcalde delegada de Cultura y Patrimonio Histórico, Pilar Pintor, acompañada por el arqueológo del Ayuntamiento, Rafael Jiménez-Camino, y la directora del Museo Municipal, Rosabel O´Neill, ha visitado esta mañana el yacimiento arqueológico de la calle San Nicolás, que alberga la factoría romana de salazones, y en el que el Consistorio está trabajando de cara a poder abrirlo al público antes de que acabe este año.

Esta actuación sobre uno de los yacimientos más importantes no solo de la provincia de Cádiz, sino del Mediterráneo, se desarrolla de la mano de la Delegación de Cultura con el apoyo de la Delegación de Fondos Europeos que dirige la teniente de alcalde Yessica Rodríguez, ya que su ejecución en emmarca en los fondos EDUSI del Barrio de la Caridad. También ha agradecido el apoyo prestado tanto por la Junta de Andalucía como por la Universidad de Cádiz.

La edil destaca que este complejo arqueológico fue declarado Bien de Interés Cultural en el año 2000, y que durante décadas se ha venido trabajando para llegar a este punto, en el que se ha completado la cimentación de la cubierta que dará cobijo a los restos aparecidos en su día en la parcela, y que permitirá su puesta en valor para darle conocimiento al conjunto de la sociedad, a través de la oferta que realiza cada año el Museo Municipal.

El yacimiento cuenta con una cronología que va desde el siglo primero antes de Cristo hasta el Bajo Medievo, y se añadirá a los recursos museísticos y turísticos de la ciudad, entre los que se encuentran la Capilla del Cristo de la Alameda, recuperada también con fondos EDUSI, el propio Museo Municipal o el recinto arqueológico de las Murallas Medievales.

Por su parte, el arqueólogo municipal ha explicado que la cubierta tendrá 600 metros cuadrados de superficie y siete metros de altura, y estará apoyada sobre cuatro pilares, lo que permitirá al yacimiento contar con una visibilidad completa. Estos trabajos han permtiido también descubrir lo que parece ser parte de un campamento militar que fue utilizado en el asedio castellano a la ciudad del año 1279.

La parcela será ajardinada y el yacimiento contará con una barandilla perimetral para que el público pueda acercarse a contemplarlo, y la entrada al complejo estará en el Parque de las Acacias, contando con paneles informativos para que los visitantes conozcan la historia.