Reloj Monumental de la torre de la Iglesia de la Palma

Reloj monumental de la torre de la Iglesia de la Palma

Diseñado por George Gram en 1741, el reloj de la Iglesia de Nuestra Señora de la Palma se construyó en al año 1771 y se instaló en el año 1804, cuando finalizó la construcción de la torre. Su precisión es asombrosa y puede permanecer meses sin ningún ajuste.

La máquina de las horas

Detalle de la maquinaria del reloj

El hombre debió sentir desde temprana época la necesidad de controlar el paso del tiempo diurno. Podemos conjeturar que el hombre tuvo una primera noción del paso del tiempo por el cambio de posición de la sombra producida por el sol, y otra noción más culta después, como consecuencia del conocimiento ya adquirido, de que el tiempo es una entidad física de la que éste no puede sustraerse, y que incluso podría medir. Para la primera etapa le fue suficiente al hombre la idea de que medía el tiempo por el sol.

La segunda etapa lleva al ser humano a hacer una verdadera ciencia de la medición del tiempo, sin prescindir de la marcha del sol, ya que ésta era la referencia obligada. Se dividió el día natural en porciones de tiempo que a la larga se convertirían en horas.

Pocos se han parado a pensar que las horas, tal como las conocemos hoy, tienen a lo sumo ochocientos años de antigüedad. En el siglo XII ningún reloj señalaba las “cinco y veinte” o las “ocho menos cuarto”; entre otras cosas, porque esos conceptos no significaban nada para los hombres que se aprestaban a marchar a las Cruzadas. Los relojes de Sol, de arena, de aceite, de cuerdas impregnadas en material combustible, de velas y las clepsidras o relojes de agua, fueron usados desde tiempo inmemorial. Pero la revolución en la medida del tiempo viene asociado con la invención del reloj mecánico.

Los primeros fueron construidos por herreros a final del siglo XIII. Aunque su precisión era muy escasa, ni siquiera llevaban minutero, cambió radicalmente la percepción que la gente tenía del tiempo. Ahora aparecía como algo palpable. La imperturbable marcha de aquellos primitivos relojes permitió concebir el tiempo como algo independiente de los ciclos naturales.

Los relojes de verga y foliot dieron paso en el siglo XVII al reloj de péndulo. En el mismo siglo se inventó el áncora, mecanismo que da regularidad al movimiento de la rueda de escape.

La restauración

Resanamiento, reparación, restauración y embellecimiento. Todas sus piezas son originales. Su maravillosa maquinaria consta de casi cuatro mil piezas, 3.972 para ser exactos. Todas ellas han sido tratadas. Las más delicadas (Clavija, noria-escape) han sido limpiadas con ultrasonidos para evitar cualquier daño y así respetar por completo su construcción. Podemos decir que su estado actual es el mismo que mostraba en el siglo XVIII. Trabajos realizados desinteresadamente por el equipo de restauradores bajo la dirección del Relojero Mayor de Algeciras: José Luis Pavón Manso.

El tipo de reloj es mecánico de tres carretes, movimiento, sonerías de cuartos y toques de horas completas. Las medidas con bancada horizontal en hierro fundido son 2.310 de longitud, 710 de anchura y 740 de altura (medidas en milímetros).

José Luis Pavón José Luis Pavón, relojero mayor de Algeciras